SHADOW OF THE COLOSSUS

Shadow of the Colossus es un juego de Playstation 2 (también disponible en PS3 en versión HD) creado por el Team ICO, el segundo de este equipo. La trama del juego nos pone en la piel de un joven guerrero que viaja a una tierra prohibida ya que allí se supone que hay un hechizo para resucitar a los muertos. Nuestro protagonista desea usar ese conjuro para revivir a su amada, pero al llegar al lugar, una voz le dice que solo podrá hacer uso de este si destruye los 16 ídolos del templo… algo que ningún mortal puede realizar y por lo tanto deberá acabar con los 16 colosos que representan estos ídolos.

Y con esta introducción empezamos un juego cortito, pero entretenido. Nuestro objetivo es más que claro, vencer a los 16 Colosos que hay repartidos por todo el mapa, la omnipresente voz nos va diciendo que Coloso debemos derrotar en cada momento e inmediatamente debemos partir al lugar y enfrentarnos a él. Claramente el mapa es grande e imposible de recorrer a pie, es por ello que el protagonista cuenta con su fiel caballo, Agro, al cual podemos llamar usando el botón X y subirnos a él con el triangulo. Agro también nos ayudará en varios combates contra los Colosos, aunque en la gran mayoría tendremos que hacerlos en solitario.

En lo referente a los Colosos, es una maravilla ver que cada uno de estos enormes bicharracos se ha de derrotar de forma totalmente diferente. Hay algunos que tienen una estrategia similar, pero en general todos son diferentes y nos harán pensar el cómo vencerlos a cada segundo. Los que más destacaría de ellos serían los Colosos número siete, once y quince, que son los que más me han gustado en batalla, sobretodo el once, ya que en ese parecía que por fin se acordaban de que el protagonista podía usar la voltereta para esquivar y por una vez no teníamos un enemigo de tamaño gigante.

Mientras que los Colosos número diez, catorce y dieciséis han sido los que menos me han gustado. El caso del diez me parecía que te mantenía en demasiada tensión debido al daño que hacía, pudiendo quitarte media barra de vida con un golpe, y daba muy poco margen para estar usando el ensayo y error de forma continua. El catorce me resultó una versión más rebuscada del número once y el dieciséis… sé que es el último coloso y por lo tanto debe ser el más complicado, pero es un combate tedioso y totalmente pensado como una fase de plataformas, un solo error y podemos acabar teniendo que hacer las cosas desde su base… o peor, desde el principio de la batalla.

Algo que sufre mucho el último coloso y todos los que tienen fases de salto, es la cámara del juego. La cámara es el punto más negativo y en gran cantidad de ocasiones deja vendido al jugador colocándose en una posición bastante mala o moviéndose de forma confusa. Hay formas de controlarla, pero en momentos en donde tienes un segundo para realizar una acción, claramente no te apetece gastarlo poniendo bien la cámara.

Los controles también son algo toscos en ocasiones, a Agro llega a costarle girar por mucho que le dices o depende a donde este mirando la cámara, ves que giras en la dirección contraria a la que quieres, el protagonista tiene un equilibrio pésimo y si te acercas demasiado a un borde tienes muchas papeletas para caerte de él y también cuenta con algunas animaciones que no se usan nunca, como los ataques de espada al frente, tiene combos con ella, pero como mucho vas a dar un golpe y contra un único Coloso, el resto usan siempre la de clavar la espada.

En tema de graficos hablamos de un juego de Playstation 2 y aunque en ocasiones la iluminación se pase de rosca, los escenarios y todo tienen un aspecto fantástico y el tema de modelados cuenta con algunos detalles, sobretodo en nuestro protagonista, al cual se le van viendo las heridas o el desgaste de la ropa según derrotamos Colosos. La música también cumple poniéndonos siempre en situación, las batallas de Colosos cuentan con dos temas, cuando estamos luchando desde el suelo y cuando ya nos hemos subido encima suyo, siendo este segundo tema mucho más acelerado para representar la tensión que se tiene al subirte encima de estos gigantes.

La historia es sencilla, sin muchos secretos o tramas enrevesados, se la podría considerar un cuento breve, pero muy bonito y que seguramente nos sorprenda con su final. Y aunque la historia sea bonita, es totalmente lineal, no parece que se puedan activar Colosos en el orden en que queramos y es por ello que el juego ve bastante reducida su rejugabilidad, es corto y puedes jugarlo cada cierto tiempo durante unos pocos días, pero no vas a sentirlo igual que la primera vez, ya que las estrategias contra los colosos siempre son las mismas y casi será como ver una película por segunda vez, una película muy buena, pero no te va a sorprender otra vez.

En conclusión, Shadow of the Colossus es un juego de aspecto bonito y con batallas únicas, algunos de los controles son algo toscos y la cámara traicionera, pero cumple perfectamente con su función y nos da diez horas de puro entretenimiento. Recomendado para todo aquel que no tenga fobia a los caballos.